Salud mental en el trabajo

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Tengo un trastorno por déficit de atención, un trastorno por depresión mayor y un trastorno de ansiedad generalizada. Cuando conocí al equipo de Merck en la conferencia de Disability:IN de 2019, hablamos de mis estudios en bioquímica en una institución de STEM de Nueva Jersey, y les dije que estaba interesada en unirme a su empresa. Posteriormente obtuve una pasantía en Merck para escribir un artículo de revisión crítica sobre los avances recientes en una metodología de separación biomolecular utilizada en laboratorios para la caracterización y estabilidad de biomezclas como vacunas.

Formaba parte de un equipo de científicos inteligentes y apasionados que conocían mis discapacidades y estaban dispuestos a trabajar conmigo para mitigar cualquier impacto. Desafortunadamente, me recetaron nuevos medicamentos en esta época y, a medida que avanzaba la pasantía, mi distracción se hizo más acusada. Para ayudarme, mi equipo puso a mi disposición herramientas de gestión del tiempo, me amplió los plazos y se reunió conmigo tanto como fue posible para asegurarse de que estaba avanzando en mi trabajo. También me uní a un grupo de apoyo que incluía mentores familiares y empresariales. Tras varios retrasos y obstáculos, me animaron a dar un paso atrás y a centrarme en mi salud.

Esta oportunidad me ayudó a aprender no solo de ciencia sino también de mí misma. Mis discapacidades no son algo que pueda desechar simplemente y, aunque soy una científica inteligente, soy consciente de que tengo muchos obstáculos por delante. Si se siente de algún modo identificado con mis luchas, entonces sepa que su salud mental y física es lo primero y que, cuando considere que está listo, hay muchas personas talentosas y amables dispuestas a ayudarlo lo mejor que puedan.

 

Por: Alejandra López-Díaz